Febrero ya. Mes de muchas sorpresas y acontecimientos.Mes de "impacto".
Lo digo porque me toco experimentarlo en carne propia, impacto emocional, impacto sentimental, impacto contra el piso.
Como dice mi nieto de 13 ya, "te paso todo abuelita este mes y con nosotros...te paso todo".
Por otro lado mi hija que cumplió un año mas de los que ya tiene, me dice "esto que te paso es para evitar que te pase algo mayor"...suerte la mía!.
Feliz de experimentar calor familiar y dolor humano, sin contar las satisfaciones y "torticolis" de la que fui objeto por "exagerar" mis fuerzas y cualidades. Voy mejorando.
Como les decía, "tango", es un pug al que yo veía hermoso hasta ese dia, retrocedio asustado y con tal fuerza que lo primero que encontro, fueron mis pies. Por supuesto que ahí no era el lugar mas apropiado para esconderse, así que corrió con mas fuerza todavía sin pensar que su elegante correita estaba sujetandome a mi. Yo, con menos elegancia, fui a parar mitad al aspero cemento y mitad a la tierra cubierta de verde pasto que como dije fue madre, porque me protegió de un infortunio mayor. Lo de la"torticolis" si me toco. El agotamiento me llevo a quedarme dormida sobre una almohada gigante. La temperatura bajo de 70 a 48 F. Dos días, va para tres y mejorando.
Pero todo eso nos lleva a una reflexión y es que los extremos en cualquier caso nos causan desazón y quizás serios problemas.
Me asuste, porque no hay mas pánico que saber que si adoras caminar, de pronto... no puedas hacerlo!
Me asuste, porque sentí y además comprobé que si subes y bajas con tanta energía, no alcances ni siquiera a ponerte de pie.
Rogué a todos los santos (que no conozco) y llame a todos mis angeles (que si conozco) para pedirles que me protejan y me ayuden. Que importante fue sobreponerme al dolor y ordenarme a mi misma a reponer mis fuerzas, a exigirle a mi cuerpo recuperar la salud. Seguiré mejor, pero con cautela, ya no es lo mismo los "sixteen" que los "sixty's".
CARIDAD, FEBRERO 2012
Lo digo porque me toco experimentarlo en carne propia, impacto emocional, impacto sentimental, impacto contra el piso.
Como dice mi nieto de 13 ya, "te paso todo abuelita este mes y con nosotros...te paso todo".
Por otro lado mi hija que cumplió un año mas de los que ya tiene, me dice "esto que te paso es para evitar que te pase algo mayor"...suerte la mía!.
Feliz de experimentar calor familiar y dolor humano, sin contar las satisfaciones y "torticolis" de la que fui objeto por "exagerar" mis fuerzas y cualidades. Voy mejorando.
El primer caso, como lo conté antes, me hizo tomar contacto con la madre tierra en menos de un segundo. Nunca imagine que un perro se asustaría de otro! . Pasearlos no es tan simple...trae consecuencias.
Como les decía, "tango", es un pug al que yo veía hermoso hasta ese dia, retrocedio asustado y con tal fuerza que lo primero que encontro, fueron mis pies. Por supuesto que ahí no era el lugar mas apropiado para esconderse, así que corrió con mas fuerza todavía sin pensar que su elegante correita estaba sujetandome a mi. Yo, con menos elegancia, fui a parar mitad al aspero cemento y mitad a la tierra cubierta de verde pasto que como dije fue madre, porque me protegió de un infortunio mayor.
Conclusión, la rodilla derecha raspada y golpeada, la mano derecha golpeada y raspada.
Eso no fue todo, la parte izquierda también recibió lo suyo; me caí sobre el brazo y la mano con la palma puesta hacia el piso! como?? solo "Tango" lo sabe.
La recuperación fue rápida, podía caminar en dos días;la mano tomo mas,5 días y ejercitando los dedos que podía mover. Nada roto...bueno, mi orgullo y mi amistad con "Tango".
No me ofrezco a pasear perros.
No me ofrezco a pasear perros.
Pero todo eso nos lleva a una reflexión y es que los extremos en cualquier caso nos causan desazón y quizás serios problemas.
Me asuste, porque no hay mas pánico que saber que si adoras caminar, de pronto... no puedas hacerlo!
Me asuste, porque sentí y además comprobé que si subes y bajas con tanta energía, no alcances ni siquiera a ponerte de pie.
Rogué a todos los santos (que no conozco) y llame a todos mis angeles (que si conozco) para pedirles que me protejan y me ayuden. Que importante fue sobreponerme al dolor y ordenarme a mi misma a reponer mis fuerzas, a exigirle a mi cuerpo recuperar la salud. Seguiré mejor, pero con cautela, ya no es lo mismo los "sixteen" que los "sixty's".
Este mes, los recordé a todos...
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